Cuando
llegamos a RD, la cosa que nos sorprendió más fue el precio de la comida. No
necesito comprar el desayuno y cena porque la mamá(de casa anfitriona) me la
prepara. Pero el almuerzo no está incluido. Entonces, tenemos que comprarlo todos los días. El problema es que los comedores cerca
de Entrena(La institución en la que estudiamos español) son muy caros.
Generalmente una comida completa es más de 200 pesos(5,000 Korean won). Mis tres compañeros y yo pensamos así: Si cada gente
prepara un sándwich, ahorraremos el dinero.
Primero,
fuimos de compras. Para comprar dos panes, una mermerada, una mantequilla, un
packet de salchica, un cartón de leche, una agua cate, y racimo de guineos,
cada gente gastó 135 pesos. Pensamos que ahorraríamos bastante si lo comemos en
dos días.
¡un desastre!
Pero, eso
realmente fue una ilusión. Lo que compramos nos pareció mucho la primera vez.
Lo que pasó es que nos tardó solo 30 minutos para comernos todo. Y, lo
importante es que no fue delicioso y no estábamos llenos.
Decidimos
comer fideos para llenar nuestro estómago. Lo compramos en On The Run y cada
uno gastó 55 pesos más. O sea, cada gente pagó 190 pesos para almorzar.
Cuando
volvimos a Entrena, nos sentimos muy triste. Es porque, primero, no pudimos
ahorrar el dinero. Gastamos casi igual como un plato de La Francesa(Un comedor
cerca de Entrena). Segundo, no ahorramos el tiempo tampoco. Por fin salimos
para comer fideos. Por eso, no descansamos suficiente. Tercero, comimos hidrato
de carbono dos veces. Fue una comida no balanzada. No comimos algo sano.
Aunque estábamos muy triste, aprendimos algo: Hacer un buen
sándwich no es una buena idea para nosotros. Comprar un plato sería mejor para
nosotros. ¡Qué fracaso tan instructivo para los tacaños!
댓글 없음:
댓글 쓰기